Estarás de acuerdo conmigo en que los valores familiares están en crisis, no sólo en nuestro país sino en el mundo entero. La vida familiar en todos los sectores de la población está ensombrecida por la desesperanza de un futuro incierto. Las frustraciones, el enojo y el miedo que experimentan los adultos -como sentimientos producto de individualismo, falta de comunicación, violencia, crimen, falta de respeto a los seres humanos, a los animales y a la naturaleza en general- se transmiten a los niños.
Te preguntarás: ¿qué se puede hacer? ¿Cómo impedirlo? ¿Cómo aliviar lo que sentimos y evitar contaminar a nuestros hijos? ¿Cómo pueden los adultos, los papás, tener la claridad para evitar a toda costa transmitir estos miedos y frustraciones a niños que se convertirán en adultos y padres y que a su vez transmitirán lo mismo a las nuevas generaciones? ¡Qué gran responsabilidad debemos sentir todos aquéllos que somos padres o bien estamos en contacto directo con niños! Todos deseamos que ellos sean felices, que vivan en armonía, que gocen su niñez con amor y ternura, jugando y haciendo uso de la extraordinaria fantasía que les permite su imaginación, en lugar de que su presente y su futuro se vean afectados por nuestras angustias.
Honremos la paternidad y acerquémonos a la espiritualidad para ofrecer ayuda a nuestros hijos y a los hijos de nuestros hijos; a los niños de hoy, a los adultos de mañana y a los que les sigan. Los niños frecuentemente nos dan muestras de su espiritualidad instintiva: nos aceptan como padres sin condición alguna, nos aman y necesitan tal cuales somos.
No importa cuán irritables y regañones seamos, exitosos o no, gordos o flacos, siempre nos aman y quieren estar con nosotros. Su amor es siempre mucho más incondicional que el nuestro; aunque sean demandantes –si tú se los permites-, también tienden a ser cooperativos, pues disfrutan cuando su ayuda es requerida. Reconozcamos que la presencia de un niño siempre es algo positivo en la vida.
#PiensaPositivo
Estoy segura que eres ejemplo de valores enseñanza y tú eres un pilar para muchas familias Gracias