¡Qué hermosa palabra! pero ¿qué tanto nos dedicamos a honrarla?
Yo creo que si en algo es experto el ser humano es precisamente en engañarse a sí mismo. ¿La razón? No querer enfrentar la verdad de las cosas porque ello implica, en muchos casos, aceptar, resignarse, esforzarse, luchar.
En este terreno nuestra mente se vuelve un arma poderosa. Basta que le demos la orden del tipo de película que deseamos sea nuestra vida, y ella se encargará de inmediato de elaborar el guión perfecto.
La honestidad es el atrevernos a hacernos las preguntas más duras y tener el valor de contestarlas con la verdad. Y en esta verdad va todo nuestro entorno, creencias, deberes, responsabilidades y postura ante la vida.
De ninguna manera resulta fácil lo sé, pero si deseamos una vida en armonía es necesario ser honestos con nosotros mismos y con los demás.
A veces pensamos, equivocadamente, que con negar la realidad ésta desaparecerá. La verdad es que no puedes cambiar lo que no aceptas, y si no lo cambias, cada vez se volverá peor.
Un fumador no dejará de serlo hasta que lo acepte, un matrimonio disfuncional no mejorará hasta que los esposos reconozcan que hay problemas, no cambiarás una actitud que te lastima hasta que la reconozcas.
A nadie le gusta que haya problemas y cuando éstos se presentan los esquivamos, los disfrazamos, los guardamos en el closet del estrés y dejamos que el tiempo pase y a veces lo logramos; pero solo temporalmente, porque tarde o temprano volverán a exigir nuestra atención.
El fracaso en lo que hacemos es la forma en que la vida nos muestra que estamos actuando de manera equivocada.
#PiensaPositivo
Mariano,gracias por existir,he pasando,por momentos muy difíciles,pero al oír tu progama , qué pasar de las caídas,tengo levántame y seguir adelante,gracias quisiera conocerte en persona Dios los bendiga a todos los integrantes de tu progama