El día que esté viejo y ya no sea el mismo, ten paciencia y compréndeme. Cuando derrame comida sobre mi camisa y olvide como atarme los zapatos, recuerda las horas que pasé enseñándote a hacer las mismas cosas.
Si cuando platiques conmigo repito y repito la misma historia que tú conoces de sobra, no me interrumpas y escúchame. Cuando eras pequeño, para que te durmieras tuve que contarte miles de veces el mismo cuento hasta que cerraras tus ojitos.
Cuando haga mis necesidades frente a otros, no me avergüences no tengo culpa de ello, no puedo controlarlo. Piensa cuántas veces te ayudé de niño pacientemente.
No me reproches porque no quiera bañarme; ni me regañes por ello. Recuerda cuando te perseguía y los mil pretextos que inventaba para hacerte más agradable tu aseo.
Acéptame y perdóname ya que el niño ahora soy yo…
Cuando me veas inútil e ignorante frente a todas las cosas que tú sabes y que ya no podré entender, te suplico que me des todo el tiempo que sea necesario para no lastimarme con una sonrisa burlona o tu indiferencia.
Siempre participé en la educación que hoy tienes para enfrentar la vida tan bien como lo haces, y si fallan las piernas por estar cansadas, dame una mano tierna para apoyarme como lo hice yo cuando empezaste a caminar con tus débiles piernitas, no te sientas triste o impotente por cómo me ves, dame tu corazón, compréndeme.
De la misma manera como te he acompañado en tu sendero, acompáñame a terminar el mío, dame amor y paciencia que yo te volveré gratitud y sonrisas con el inmenso amor que tengo por ti; piensa que con el paso que me adelanto a dar, estaré construyendo para ti otra ruta de amor en otro tiempo.
Gracias por tan hermosa reflexión.
Gracias a Dios yo tengo a mi padre de 90 años y mi madre de 80 .
Ellos a la fecha no han llegado al retroceso de la edad. Son todavía independientes de su higiene personal. Entre todos mis hermanos estamos al pendiente cuidado tan valioso tesoro que Dios nos permite conservar. Y de estás reflexiones nos alimentamos para ser mejores hijos y padres. Marino Dios te bendiga por tan hermosa labor.