Las mascotas son una parte muy importante de cualquier familia. Tienen una alta responsabilidad puesto que además de alimentarlas y cuidarlas para que estén sanas (con sus revisiones en el veterinario) también hay que aportarles mucho amor, porque se lo merecen. Lo que en algunas ocasiones se olvida es que las mascotas aportan mucho más de lo que nos imaginamos. Si tienes un perro en casa, sabrás de lo que estoy hablando.
Los perros son capaces de conectar emocionalmente con su familia humana y saben ofrecer consuelo cuando alguien lo necesita, son capaces de que una persona que se siente triste o con angustia se pueda sentir mucho mejor.
Un perro es mucho más que una mascota. Es un compañero, es parte de la familia, es un confidente… Y cualquier familia que tenga un perro entenderá lo especiales que pueden llegar a ser. Tu perro sabrá cómo estás con tal solo mirarte, entenderá a tus hijos incluso antes que tú mismo en cuanto a su estado emocional. Los perros saben establecer conexiones emocionales muy importantes con sus dueños y además infranqueables. Ellos son animales fieles que estarán a tu lado y te querrán, pase lo que pase. Los perros son altruistas, tienen un alma limpia y pura, solo desean tu bien, tu felicidad al lado suya.
Tu perro te ayudará a entender cómo tu familia está completa desde su llegada. Te ayudará a sentirte mejor, a disfrutar de los momentos en familia, a salir a pasear y estar más sano, a que tus hijos aprendan responsabilidades gracias al cuidado que debe tener, a que todos trabajen la empatía, y nunca se sentirán solos porque siempre estará con su mirada para daros compañía y deciros que está a nuestro lado.
Tu perro nunca te juzgará, solo estará a tu lado para ofrecerte todo su apoyo emocional, todo su amor incondicional. Será quién esté a tu lado sin decirte que hagas una cosa u otra. Será una parte importante de tu familia puesto que solo os aportará beneficios emocionales. Tu perro estará allí con vosotros, contigo, te dará siempre lo mejor de él mismo a cambio de nada, porque solo quiere tu amor incondicional, eso es lo que le hace realmente feliz.
Si tienes un perro como mascota y parte de tu familia, te habrás dado cuenta de cómo es capaz de aportar calma a tu hogar, cómo te hace reír a carcajadas, cómo te hace sentir bien cuando te reclama, cómo la soledad nunca será un problema en tu hogar, cómo cuando te duele algo sabe que te necesita y se acerca para darte consuelo. Tu perro es parte de tu familia, es un héroe de cuatro patas dentro de tu hogar, es quién os entiende a todos, aunque no sepa hablar… Su mirada te lo dirá todo.
Fuente: Compartamos.com.mx