Algunas personas empiezan su día con la lista de razones o motivos que ellos creen, les produce el estrés: el trabajo, el tránsito, su familia, los vecinos, la política. Sin embargo algunos especialistas sugieren que básicamente nuestros pensamientos generan este síntoma; es decir, la forma en que apreciamos los sucesos y reaccionamos ante ellos. Suena lógico, ¿verdad?
Piensa cuántas veces al día sostienes platicas privadas contigo mismo respecto de lo que te sucede a ti y a tu alrededor. ¿Tal vez todo el tiempo?
Cada día, a cada momento, bañándote, manejando, en el autobús, cuando te encuentras a solas te preguntas, te contestas e incluso hasta te molestas por algunas cosas que te atreves a pensar. Dibujas en tu mente diferentes escenarios sobre un mismo asunto e incluso les asignas diferentes finales; lo malo es que algunas personas lo hacen desde una óptica exagerada y negativa.
Pensar es casi como respirar y si te das cuenta realizas ambas funciones sin darles importancia, aun siendo vitales para la vida.
Desestimamos el acto de pensar pero acumulamos una enorme cantidad de estrés al estimularlos y llevarlos a extremos inimaginables, sobre todo cuando se trata de los relacionados con algún problema propio, alguien cercano, discusión o pendiente de trabajo.
Te sugiero que antes de dar rienda suelta a toda tu imaginación y con ello a tu angustia recapacites y en ese preciso momento, te des cuenta que lo que estás haciendo es sólo atacarte con pensamientos negativos e irreales.
No pretendo convencerte de que no te preocupes o de que pases el día evadiendo lo que debes resolver. Más bien, te sugiero que no pienses que mañana será el día más pesado de tu vida cuando todavía faltan muchas horas para que éste comience; tampoco pongas en tus pensamientos palabras o acciones que supones que otros harán ni acontecimientos que en absoluto dependen de ti.
Si reconoces este tipo de pensamiento en ti, trata de cambiarlo. Si lo intentas, muy pronto estarás gratamente sorprendido al percibir con claridad cómo tus estados de estrés y ansiedad se reducen notablemente.
#PiensaPositivo
Muy interesante cada uno de los artículos creo que debemos conocernos a nosotros mismos y tener un nivel de conciencia para detectar en el momento nuestro estado de ánimo para saber cómo reaccionar ante los hechos que ocurren.
Un abrazo Mariano y mil gracias por la información saludos.