Ya llevamos un poco de la mitad de las vacaciones de verano y yo tengo una pregunta para ti, si es que tienes hijos entre los 10 y 15 años de edad: ¿Qué tanto has estado encima de tus hijos en estas vacaciones? Aclaro, no me refiero a supervisarlos y a convivir con ellos.
No importa qué tan buenas o justificadas sean tus intenciones, tienes que estar muy alerta y darte cuenta si en lugar de protegerlos y ayudarlos a crecer, estás haciendo todo lo contrario. Pues algunos papás no podrán negar que algunas veces hasta el suspiro quieren resolverles a los hijos. Les siguen atando las agujetas a los 10 años de edad, o les dicen a diario lo que deben vestir; hablan con sus maestros cuando no hicieron la tarea, les organizan todas sus actividades extraescolares y hasta les ayudan a resolver sus peleas con los amigos.
Al intervenir con obsesión en la vida de nuestros hijos, estamos evitando que ellos desarrollen su propia fortaleza para resolver los problemas y desafíos de la vida.
En días pasados, cuando leía sobre este tema, encontré que existen 3 diferentes estilos de paternidad: los papás Tigres, los papás Medusas y los papas Delfines.
Los papás Tigres son autoritarios y excesivos. Presionan a sus hijos a ser exitosos a través de reglas estrictas e inflexibles.
Los papás Medusa carecen de estructura, cero reglas y falta de atención y enfoque.
Los papás Delfines, son firmes pero a la vez flexibles. Tiene reglas, así como expectativas. Los padres están presentes y ayudan cuando se necesita, pero hay flexibilidad para la independencia de los hijos, la resolución de sus problemas, la autonomía y apertura a los errores y el aprendizaje a través de estos.
Todos deseamos lo mejor para nuestros hijos, ¿no es así? Entonces a partir de hoy seamos papás Delfines, por el bien de ellos y el nuestro.
Mariano Osorio
#Piensa Positivo.
MUCHAS GRACIAS por la reflexión, sin duda soy mamá Delfin