Los padres son nuestros grandes guías desde los primeros días en este mundo, hasta que alcanzamos la madurez. Su amor es incondicional y son el apoyo más sincero que podemos tener.
Es casi imposible retribuirles completamente todo lo que hacen por nosotros, pero de acuerdo con un estudio alemán puedes hacerlos muy felices si simplemente te independizas y te mudas de su casa.
Esto puede sonar muy rudo, e incluso algunos podrían suponer que es porque se terminó el cariño paterno o algo por el estilo, pero nada más alejado de la realidad.
De acuerdo con la investigación de Christoph Becker y su equipo de la Universidad de Heidelberg, los padres cuyos hijos han abandonado el hogar paterno son mucho más felices que los padres con hijos dependientes de ellos.
Para llegar a esa conclusión analizaron los datos de 55 mil personas de 50 años o más, quienes respondieron encuestas acerca de su bienestar emocional.
Descubrieron que las personas con hijos tenían una mayor satisfacción con la vida y menos síntomas de depresión que las personas sin hijos, pero solo si sus descendientes ya habían abandonado su casa para construir su propia vida.
Esto se debe, en la mayoría de las ocasiones, a que cuando los hijos crecen y logran mudarse le brindan un enriquecimiento social a sus padres, además de que les quitan una gran carga diaria de estrés.
También porque se acostumbra que los hijos devuelvan un poco del apoyo recibido, ya sea económico, emocional o de cuidados, lo que supera los aspectos negativos de la paternidad.
Becker señala que cuando los padres están al pendiente de sus hijos, tienden a tener niveles de estrés elevados, menos horas de sueño y poca solvencia económica. Es por eso que cuando son los propios hijos lo que les quitan esa obligación, los padres se sienten realizados y mucho más tranquilos.
NewScientist, sitio web especializado en noticias científicas, afirma que algo muy similar se descubrió en la población de Estados Unidos.
En este caso, el investigador de la Universidad de Utah Nicholas Wolfinger analizó 40 años de datos de la Encuesta Social General de Norteamérica y encontró que los padres de «nidos vacios» de 50 a 70 años eran un 6% más propensos de informar que estaban muy felices, que los que aún tienen niños en casa.
Una solución que no implica la partida temprana de los hijos es mudarse a un país con mejor apoyo para el cuidado de los niños, de acuerdo a Wolfinger.
Según lo dicho por el investigador americano, en el 2016 en 22 países se descubrió que los padres con hijos en el hogar eran un poco más felices que sus semejantes sin hijos, si vivían en naciones como Portugal, Suecia o Noruega, en donde son famosos los subsidios gubernamentales para el cuidado de los niños, las largas vacaciones y la licencia por enfermedad.
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Fuente: Quo