¿Qué hay detrás de este comportamiento tan controversial del género masculino?
¿Has atrapado a tu pareja viendo los glúteos de alguna mujer que va pasando frente a ustedes?
Que un hombre se fije en los glúteos de otra mujer puede llegar a ser molesto y a provocar inseguridades y desconfianza en una relación. Sin embargo, debes saber que esta tendencia que tienen los hombres a fijarse en el trasero del sexo femenino tiene raíces evolutivas y biológicas, ¿a qué nos referimos con esto? A que se trata de un comportamiento relacionado con la selección sexual y la reproducción, aunque actualmente algunos componentes sociales y culturales también influyen en dicha acción.
La perspectiva evolutiva
A lo largo de los años, los glúteos grandes en las mujeres han sido símbolo de la fertilidad y buena salud. ¿Sabías que las pompas grandes y redondeadas están asociadas a la capacidad de llevar un embarazo saludable y exitoso gracias a la acumulación de grasa en esa zona? Pues es una señal de que hay reservas de energía para una correcta reproducción.
Los glúteos destacan la postura bípeda de los seres humanos, es decir, un trasero prominente y redondeado, junto con la curvatura de la espalda baja, es capaz de provocar una atracción inconsciente en las personas, pues como se dijo antes, es símbolo de buena salud.
Factores sociales y culturales
En la época moderna, los medios de comunicación y las campañas publicitarias se han encargado de imponer estándares de belleza en las mujeres, lo que ha jugado un papel fundamental en el “cuerpo perfecto”. Se le ha dado un foco de atención a los atributos femeninos, como los glúteos y los senos, que ha llevado a la sociedad a relacionar la belleza con estas partes del cuerpo
Fuente: Cosmopolitan