Con frecuencia algunas de las personas con quienes hablamos, interactuamos, escuchamos o leemos en algún medio, nos expresan su deseo de ver un cambio en nuestra sociedad. Ya sea a través de sus críticas o ideas de lo que ellos creen que es la solución.
No hay duda de que cada día tenemos a la mano un nuevo suceso, noticia, comentario que nos grita a la cara que algo tenemos que hacer para ayudar al cambio.
Y muchas cosas podemos hacer desde nuestra humilde o poderosa trinchera. Pero hay una por la que debemos empezar. Ser congruentes con lo que hablamos y hacemos. No podemos ir por la vida gritando a los 4 vientos una cosa y actuar completamente lo opuesto a lo que pregonamos.
A los hijos, a los amigos, a tus padres, a tus colegas, a tus seguidores, a quien sea que dirijas tus palabras, tienes que asegurarte de que tus acciones no las contradigan.
Cuando las ideas que promueves son congruentes con tus verdaderos valores y creencias, tus acciones serán automáticamente congruentes. No hay mayor ciencia en esto.
Haz lo que dices que harás y no hagas promesas precipitadas solo para impresionar. No hay nada más poderoso que observar que tus acciones coinciden con lo que divulgas.
Recuerda que nuestras acciones moldean nuestros valores, nuestra cultura, nuestro ambiente, nuestra realidad.
Mariano Osorio
#Piensa Positivo
Me encanto tu reflexión con tespecto a la congruencia, y lo colocaste enmedio de Manuel y Elva, gracias saludos te escucho todos los días