Hace unos días escuche a un amigo quejarse amargamente de la falta de autenticidad en todo lo que compra, escucha y ve a su alrededor. Productos piratas, noticias falsas, impostores, etc.
Es cierto que cada vez estamos más expuestos – ya sea por decisión propia o sin ella- a esta nueva realidad. Sin embargo, pienso que la peor falsedad es la de no ser uno mismo.
Pensemos que la autenticidad rara vez se encuentra en grandes hazañas o grandes despliegues de personalidad, se trata de invitarte a ti mismo a honrar ese ser único e irrepetible que puedes ser.
Es la voluntad de convencerse así mismo de hacer y ser lo que tú crees que es correcto, lo que está bien, incluso cuando esto no es del gusto de los demás.
No inventes, no mientas, no levantes falsos. Evita la comparación, no desees lo que otros tienen, no anheles la vida de los demás. Este es tu momento, sumérgete profundamente en la gloriosa realidad de quien estás destinado a ser.
No te demores, no dudes en reclamar la vida que mereces.
Mariano Osorio
#Piensa Positivo