Un nuevo estudio liderado por la Universidad de Southampton y publicada en la revista Nature expone que un fenómeno geológico está provocando un distanciamiento entre los continentes de América del Norte y América del Sur de Europa y África.
¿Qué ocurre exactamente?
Al parecer, un aumento de materia desde las profundidades de la corteza terrestre sería el responsable de este ensanchamiento del Atlántico y la separación de los continentes. Las dorsales oceánicas, esas formaciones montañosas que emergen a lo largo del lecho marino entre las placas tectónicas, podrían estar más involucradas en la transferencia de material entre el manto superior e inferior debajo de la corteza terrestre de lo que pensábamos anteriormente, recalca el estudio.
Las placas adheridas a las Américas se están alejando de las adheridas a Europa y África cuatro centímetros por año. Entre estos continentes se encuentra la Cordillera del Atlántico Medio, un lugar donde se forman nuevas placas y una línea divisoria entre las placas que se mueven hacia el oeste y las que se mueven hacia el este; debajo de esta cresta, el material se eleva para reemplazar el espacio dejado por las placas cuando se separan.
Se desconoce la fuerza impulsora detrás de la separación de las placas atlánticas porque el océano Atlántico no está rodeado por placas densas que se hundan, pero ahora, los científicos han encontrado evidencia de un afloramiento en el manto, el material entre la corteza terrestre y su núcleo, desde profundidades de más de 600 kilómetros por debajo de la cordillera del Atlántico Medio (MAR), lo que podría estar empujando las placas desde abajo, provocando que los continentes se separen aún más. Normalmente, se cree que las afloramientos debajo de las crestas se originan en profundidades mucho más superficiales, a alrededor de 60 km.
El hallazgo surgió mientras estudiaban la actividad sísmica alrededor de la Cordillera del Atlántico Medio. Usando hasta 39 sismómetros desplegados en el fondo del océano (que se dejaron durante un año para registrar los terremotos de todo el mundo), encontraron evidencia de un afloramiento en el manto desde profundidades de más de 600 kilómetros debajo del MAR. Y este afloramiento está empujando las placas tectónicas desde abajo, haciendo que los continentes de Europa y África por un lado y América por el otro se distancien más.
Los datos del proyecto proporcionan la primera imagen a gran escala y de alta resolución del manto debajo del MAR, que es conocido como uno de los lugares más turbulentos de la Tierra debido a su actividad sísmica.
"Los increíbles resultados arrojan nueva luz en nuestra comprensión de cómo el interior de la Tierra está conectado con la tectónica de placas, con observaciones nunca antes vistas", explica Matthew Agius, líder del trabajo.
"Existe una distancia cada vez mayor entre América del Norte y Europa, y no está impulsada por diferencias políticas o filosóficas, ¡es causada por la convección del manto!", afirma Nick Harmon, coautor del estudio.
Si bien ya conocíamos que las dorsales oceánicas contribuyeron al fenómeno de la expansión del fondo marino, este nuevo descubrimiento muestra que los procesos generales involucrados se extienden mucho más profundamente en la Tierra de lo que se había medido previamente, e incluso pueden tener lugar en áreas del fondo marino no marcado por regiones abiertas de subducción de placa.
"Por lo tanto, es probable que las dorsales oceánicas desempeñen un papel más activo en la tectónica de placas de lo que se pensaba", concluyen los autores.
Los resultados podrían ayudar a los científicos a desarrollar mejores modelos y sistemas de alerta para desastres naturales.
Fuente: Muy Interesante