Plataformas como Instagram, Facebook y Snapchat están inundadas de personas que se toman selfies de manera regular; y ante una enorme ola de críticas acerca del porqué hacerlo, surge una verdad bastante interesante. Pero algo que es cierto, es que todos los hacemos, las compartamos o no.
Pamela Rutledge, una psicóloga del California’s Media Psychology Research Center asegura que las selfies son simplemente una forma de comunicación. Cuando se es joven, uno busca la manera de irse separando de su núcleo familiar, de sus amigos, anda en busca de una pareja y quieren saber quienes son. Todo ese proceso puede ser bastante complejo, por lo que sacar fotos ayuda a que sepan más acerca de lo que quieren en la vida. Es por eso que el 87% de las selfies que vemos en la red son de personas menores de 35 años.
Además de ayudarle a la gente a descubrir quienes son a través de las selfies, existe otro factor: la facilidad de hacerlo. Ahora que existen cientos de modelos de smartphones en el mercado, con cámara frontal, cualquiera tiene acceso a una foto. Pero antes, no era tan fácil, ya que la manera análoga requería de trabajo, a diferencia de ahora. Lo que más se retrata hoy en día, son el lookelegido, los viajes, grupo de amigos, etnicidad y la salud de uno mismo.
Además de postear de manera constante, también están quienes le dan “like” a todas esas fotos. La razón es simple: al ver una cara a través de la pantalla, mirándote de manera directa, el cerebro lo registra de manera automática como un estimulante social. Es por eso que miles reciben tantos comentarios y aprobación, cosa que buscan a través de las fotos tipo selfie. De hecho, el 38% de los likes se los llevan las imágenes de caras y cuerpo, que son preferidas sobre las de objetos inanimados.
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Fuente: Notimex