Una investigación psicológica argumenta que tomar descansos regulares de tu trabajo, no sólo hace que tu día vaya más rápido – también te vuelve más productivo.
Por otra parte, una revista de Harvard Bussiness Review destacó, hay más de un tipo de descanso – y mientras que darte chance de unos cuantos minutos de despreocupación es importante, siempre debería intentar buscar tiempo en tu día para el silencio.
Y esto no significa sólo abstenerse de hablar en voz alta; significa alejarte, por un momento, de todas las formas de comunicación.
Este tipo de silencio trata de descansar los reflejos mentales que suelen proteger una reputación o promover un punto de vista. En un ambiente como la oficina, donde las personas se expresan más cuidadosamente que en su casa, casi todo lo que dices o escribes requiere de más esfuerzo mental, es entonces, cuando el silencio se convierte en una forma de tomar un descanso de una de las responsabilidades más básicas de la vida: tener que pensar qué decir.
Cuando nos fijamos constantemente en nuestra agenda verbal – que decir después, que escribir después – es difícil hacer espacio para perspectivas e idas realmente nuevas.
Es difícil llegar a niveles más profundos de atención y escucha. Y es en esos modos más profundos de atención que las ideas realmente novedosas surgen.
Eso no quiere decir que te pongas a meditar en tu escritorio, pero que consideres tomarte un tiempo para una caminata en silencio, en vez de usarlo para twittear algo gracioso.
#PiensaPositivo
Fuente: Muy Interesante
Excelente página. Muchas felicidades.