La cebolla es un ingrediente fundamental para la gastronomía mexicana, que además de ofrecer sabores y aromas deliciosos, también aporta parte del color de nuestra bandera en los platillos a la mexicana junto al chile y el jitomate.
La cebolla es un vegetal amado por muchos y odiado por otros, pero es un ingrediente fundamental para la cocina que no pasa desapercibido. Se sabe que lleva más de 5 mil años cultivándose, aunque su origen no es mexicano, realmente proviene del norte de Asia y de Palestina, sin embargo, fueron los españoles quienes la introdujeron, y hoy en día es totalmente utilizada en la gastronomía mexicana.
Pero… ¿Qué es una cebolla?, Esta puede parecer una pregunta algo obvia, pero una cebolla es una hortaliza de la familia de las aliáceas, la cual crea un bulbo formado por hojas blancas y carnosas, recubiertas de pieles finas que dependiendo de la variedad cambia de color, se pueden encontrar amarillas, blancas, pardas o moradas, por lo general secas.
¿Cómo se consume la cebolla en México?
La cebolla más utilizada es la blanca, pero en los estados del sureste se acostumbra a emplearse en sus platillos la cebolla morada. Tiene bastante versatilidad, puesto que se puede consumir fresca, cruda, seca, semi seca o cocida, como verdura, condimento o un ingrediente de cocción.
Las cebollitas cambray por lo general se preparan al carbón, en escabeche o en algunos guisados al sartén. Las rojas o moradas son comunes de encontrar encurtida en vinagre o curada en limón con diversas especias para adobos y antojitos al sureste del país.
¿Se puede cortar cebolla sin llorar?
Aunque existen diversos mitos y ‘técnicas’ caseras como mascar un chicle, congelarla, meterla en agua fría, entre muchos más. No se puede cortar sin llorar, o no de una manera correcta, esto depende en algunos aspectos, como que cada persona puede ser más o menos sensible; quizás la costumbre, hay quienes después de estar tanto tiempo en contacto con ella se acostumbran a la sensación y llegan a ser menos susceptibles a ello.
Pero esto tiene una explicación, al cortar una cebolla se mezclan dos sustancias y el resultado de esta combinación genera un gas que contiene azufre y al momento de estar en contacto con la humedad, en este caso los ojos, se descompone en ácido sulfúrico, así que en ese momento el cerebro reacciona mandándole señales a los conductores lagrimales que produzcan más agua, o sea, las lágrimas, para que pueda eliminar el ácido y proteger la zona ocular.
Se podría cortar sin llorar si la cebolla se picara sumergida en agua, usando lentes que cubran por completo los ojos o hasta cortarla con mucha velocidad. Pero ninguna de estas opciones es recomendable, ya que puede a llegar a ser peligroso o incómodo.
En México es común encontrarlas crudas en tacos, chilaquiles, enchiladas, tostadas y en una gran variedad de antojitos. Pero también hay otras maneras de poder sacarle todo el provecho.
Fuente: Milenio