Un estudio demuestra que la luna llena puede influir en el sueño y también en los ciclos menstruales.
Hasta ahora, el folclore se ha encargado de asociar a nuestro satélite natural grandes responsabilidades como los picos de delincuencia, el estado de ánimo, la transformación de los hombres lobo en luna llena... pero, al parecer, algunos de estos cuentos o mitos parecen tener raíces en la ciencia real.
¿Interfiere en algo con el sueño?
"La luz de la luna es tan brillante para el ojo humano que es completamente razonable imaginar que, en ausencia de otras fuentes de luz, esta fuente de luz nocturna podría haber tenido un papel en la modulación de la actividad nocturna y el sueño humanos", comentaron los autores. "Sin embargo, si el ciclo de la Luna puede modular la actividad nocturna humana y el sueño sigue siendo un tema de controversia".
Ahora, un equipo de científicos de la Universidad de Washington, la Universidad Nacional de Quilmes en Argentina y la Universidad de Yale sugieren en su estudio publicado en la revista Science Advances que nuestra capacidad para dormir se ve claramente afectada por el ciclo lunar, incluso cuando se tienen en cuenta las fuentes de luz artificiales.
Experimento
Mediante una serie de dispositivos de monitorización situados en las muñecas, los investigadores rastrearon los patrones de sueño de 98 personas que vivían en tres comunidades indígenas de Argentina en el transcurso de uno a dos meses. Una comunidad rural no tenía acceso a la electricidad, una segunda comunidad rural tenía acceso limitado a la electricidad, mientras que una tercera comunidad estaba ubicada en un entorno urbano y tenía pleno acceso a la electricidad (para valorar también de qué forma la luz artificial podría afectar a los participantes).
¿Cuál fue el resultado?
El equipo descubrió que, si bien la conexión entre los ciclos del sueño y los ciclos lunares es un poco más obvia en las comunidades sin acceso a la electricidad, seguía estando presente en áreas con electricidad.
Los ciclos del sueño parecen cambiar con el ciclo lunar. Descubrieron que, en los días previos a la luna llena, los voluntarios del experimento tendían a dormir más tarde y a dormir menos horas antes de la luna llena y hacían lo contrario antes de la fase de luna nueva.
"Vemos una clara modulación lunar del sueño, con disminución del sueño y un inicio tardío del sueño en los días anteriores a la luna llena", expone Horacio de la Iglesia, profesor de biología en la Universidad de Washington. "Y aunque el efecto es más robusto en las comunidades sin acceso a la electricidad, el efecto está presente en las comunidades con electricidad, incluidos los estudiantes universitarios de la Universidad de Washington".
"Presumimos que los patrones que observamos son una adaptación innata que permitió a nuestros antepasados aprovechar esta fuente natural de luz vespertina que se produjo en un momento específico durante el ciclo lunar", dijo Leandro Casiraghi, líder del trabajo.
Este estudio mostró un patrón claro que afectará a la investigación del sueño en el futuro, según los científicos. "En general, ha habido mucha sospecha sobre la idea de que las fases de la luna podrían afectar a un comportamiento como el sueño", dijo Casiraghi.
Ciclos menstruales
En un estudio separado, publicado en la revista Science Advances, los investigadores demostraron que también podría haber algún vínculo entre los ciclos menstruales y los ciclos lunares. Analizando los registros del ciclo menstrual de 22 mujeres durante 32 años, compararon estos datos con fluctuaciones en los ciclos lunares para ver cómo se alineaban ambos parámetros. Encontraron que, de las mujeres que participaron, aquellas cuyos ciclos menstruales duraron más de 27 días se mostraron "sincronizadas intermitentemente con ciclos que afectan la intensidad de la luz de la luna", explican los autores.
Los expertos determinaron que esta sincronización se perdía lentamente con el tiempo a medida que las participantes envejecían y descubrieron que el vínculo se reducía con una mayor exposición a la luz artificial. Más específicamente, concluyeron que "los ciclos menstruales también se alinean con el mes tropical el 13,1% del tiempo en mujeres de 35 años o menos y el 17,7% del tiempo en mujeres mayores de 35 años, lo que sugiere que la menstruación también se ve afectada por cambios en las fuerzas gravimétricas de la luna".
Fuente: Muy Interesante