Conocido como “dificultad para dormir en un nuevo entorno” es un problema que ha captado la atención de los neurólogos desde hace varios años. Tanto es así que incluso le han asignado un nombre científico: “efecto de primera noche” o FNE de acuerdo a sus siglas en inglés.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Brown ha analizado este fenómeno, pero más recientemente un grupo de docentes de la Facultad de Psicología del Instituto de Tecnología de Georgia se han adentrado aún más en este fenómeno. En un artículo publicado en la revista científica Current Biology estos docentes comparten con el mundo sus hallazgos.
La dificultad para dormir en un nuevo entorno equivale neurológicamente a dormir con un ojo abierto, y se explica porque solo la mitad del cerebro de la persona logra descansar. En otras palabras, uno de los hemisferios del cerebro permanece despierto y alerta, por lo que la persona puede sentir que no logró descansar correctamente, e incluso puede sentirse más cansado que antes de acostarse.
El que se mantiene alerta es, por lo general, el hemisferio izquierdo. Lo mismo acontece con algunos animales como las aves y los mamíferos acuáticos como los delfines, que duermen así para evitar ser atacados por la noche. Sin embargo, la diferencia entre seres humanos y animales es que esta asimetría entre los hemisferios puede desaparecer a la segunda noche de dormir en un lugar extraño para los hombres, pero en los animales esta se mantiene de por vida.
#PiensaPositivo
Fuente: Agencias
Buenas tardes Mariano feliz tarde de Miercoles a mi en lo personal si me pasa eso cuando voy de viaje a visitar a mi suegra no puedo conciliar el sueño las dos primeras noches oh cuando vamos a Acampar gracias por esta informacion me fue de mucha utilidad te mando un mega abrazo muy buena tu Pagina saludos.