El próximo lunes es regreso a clases y con ello el regreso a las prisas entre el trabajo en casa y/o fuera de ella, escuela, tareas de los niños, más todo lo que se acumula a tu alrededor día a día.
Si ya estás sintiendo que el rico descanso que tuviste en días pasados se está esfumando, muy posiblemente quiere decir que necesitas organizarte más pero, sobre todo, pedir ayuda y delegar.
Una excelente forma de ayudarte es promoviendo el hábito de organizarse y adquirir responsabilidades propias entre los miembros de tu familia.
Aun si eres de esas mamás que te gusta hacerles todo…todo a tus hijos, aunque éstos ya tengan 28 años, es muy importante que les permitas aprender los beneficios de ser organizados y responsables.
Por ejemplo, podrías establecer junto con ellos una hora específica para hacer la tarea y darles la responsabilidad de hacerlo sin que tengas que recordárselos o andar tras ellos toda la tarde. Los días que no tengan tarea deberán ocupar este tiempo en leer, revisar lecciones de los días anteriores, o adelantar trabajo de un proyecto futuro. La idea es que desarrollen el hábito diario de dedicarse al estudio y al aprendizaje por su propia cuenta, mientras tú tienes la oportunidad de planear otras actividades alrededor de este tiempo, sin dejar de estar disponible por si necesitan de tu ayuda.
De acuerdo a su edad, - entre más pequeños empiecen es mejor- ensénales a ordenar sus mochilas, con la idea de que ellos mismos lo hagan cada semana. Ayúdales a entender que entre más organizada y limpia lleven su mochila a la escuela, harán mejor uso de su tiempo, incluidos sus recreos.
Enséñales a hacerse cargo de revisar su uniforme y sus útiles escolares y avisarte con buena anticipación cuando requieran de tu ayuda. Enfatízales que ellos pueden estar al pendiente de lo que necesitan durante la semana y ayudar a evitar las discusiones de última hora cuando ya es hora de dormir o el estrés de las mañanas aceleradas.
Y la mejor herramienta que puedo recomendarte por experiencia propia, es que les enseñes a hacer un calendario semanal de sus actividades y deberes escolares. Con dibujitos y colores de su preferencia, como ellos lo deseen, pero asegúrate que contenga todo lo que necesitan recordar y cumplir. Pégalo o cuélgalo en la puerta de su cuarto, al lado de su cama, en el refrigerador o en el baño. En el lugar que mejor les acomode a ellos. ¡Y claro lo más importante será tu buen ejemplo!
Mariano Osorio
#Piensa positivo